miércoles, 11 de noviembre de 2015

Un gran Frente Nacional Democrático y Patriótico para derrotar a los neoliberales.

Por Roberto ESCAMILLA PÉREZ

La política es una ciencia, es la ciencia de la transformación de la realidad en otra mejor. Es una ciencia que requiere del conocimiento de todas las demás, sin excepción. La política no es, por tanto, un arte o un artificio, mucho menos una manera de hacerse de riquezas, como quienes han deformado su práctica la entienden.
Si aplicamos la política como una ciencia, nos enseña que la sociedad humana se rige por leyes que determinan su desarrollo; que nada es estático, que todo cambia; que el cambio, al final, siempre es en el sentido del progreso; que ocurre independientemente de nuestros deseos, y que el papel y la importancia del hombre en este sentido consiste únicamente en acelerar estos cambios dependiendo de su manera de accionar en la sociedad.
También nos dice que la sociedad humana ha transitado por diferentes etapas, pasando de la comunidad primitiva al esclavismo, después al feudalismo, al capitalismo, y a la fase superior de éste, el imperialismo, y, finalmente, al socialismo.
Que en sus orígenes, la sociedad no estuvo dividida en clases sociales, en explotados y explotadores, que esta división surgió con el esclavismo y que persiste hasta ahora en la mayor parte del planeta.

Las raíces históricas del Frente Nacional Democrático y Patriótico

Asimismo, la realidad, y la experiencia histórica de México y del mundo, nos han enseñado que cuando los explotados, los pobres, los que padecen injusticias, y los mejores hombres y mujeres de una sociedad determinada, se unen, se organizan y actúan, los cambios y las transformaciones en el sentido del progreso se producen.
En México así ha sido siempre: nuestra independencia respecto a España fue gracias a la acción conjunta de sectores que, a pesar de sus discrepancias, anhelaban por sobre todas las cosas dicho objetivo, y así fue que lucharon juntos, criollos, mestizos, indígenas, mulatos, artesanos, intelectuales y esclavos.
En la Revolución Mexicana ocurrió lo mismo: contra la dictadura terrateniente porfirista se unieron en un solo frente, la burguesía en ascenso, intelectuales de izquierda, obreros, campesinos, peones e indígenas, todos ellos explotados, empobrecidos, reprimidos, discriminados o hechos a un lado por el dictador.
Dos ejemplos más ilustran de manera muy clara que la unidad y la acción conjunta del pueblo y de sus fuerzas progresistas contra un enemigo común y por objetivos comunes, es siempre exitosa: uno es la Expropiación Petrolera de 1938, que se logró gracias al frente común formado por el gobierno revolucionario encabezado por el general Lázaro Cárdenas y la clase obrera dirigida por Vicente Lombardo Toledano, a los que se unieron campesinos, empresarios e intelectuales progresistas y revolucionarios, así como las mujeres y la juventud mexicana, y sus organizaciones representativas.
El otro ejemplo es la derrota infringida a Hitler, al eje Berlín-Roma-Tokio, por parte de los aliados, incluidos entre ellos a los Estados Unidos y la Unión Soviética, adversarios ideológicos irreconciliables, que, sin embargo, olvidaron en esa etapa sus diferencias para luchar contra un enemigo común y más peligroso en ese momento histórico: el fascismo.

¿Qué es el Frente Nacional Democrático y Patriótico?

¿Qué significa todo ello? Que la unidad de las fuerzas democráticas, patrióticas y progresistas en un solo frente es una línea estratégica y táctica exitosa, comprobada e imbatible, y que constituye el mejor instrumento del que los mexicanos de hoy podemos y debemos echar mano para cambiar el rumbo de nuestro país y expulsar del poder a los neoliberales, que están sumiendo en la miseria y en el sufrimiento a millones de mexicanos, y que entregan nuestras riquezas en manos de las trasnacionales.
¿Qué es el Frente Nacional Democrático y Patriótico, por llamarlo de alguna manera, y qué se necesita para formarlo? Es la unidad en la acción de todos los mexicanos y mexicanas progresistas y revolucionarios, y sus organizaciones representativas, que, aunque con discrepancias, tengan hoy como objetivo fundamental parar en seco la aplicación de la política económica neoliberal que tanto daño ha hecho al pueblo y al país, y expulsar del poder a los neoliberales para formar un gobierno de nuevo tipo en el que estos no tengan cabida, y de esta manera lograr que el pueblo mexicano eleve su nivel de vida de manera constante, y nuestro país alcance el verdadero desarrollo económico y su independencia.
Para formar un Frente de este tipo se requiere voluntad, para concentrarnos en lo que nos une, no en lo que nos divide; respeto, para que la independencia, decisiones e integridad de cada organización se mantengan; humildad, para reconocer que nadie es propietario de la verdad absoluta, para escuchar a los demás, combatiendo el sectarismo y la soberbia, que dividen; trabajo, para reconocer que no todos podemos ser líderes, pero que todos somos importantes en esta lucha, desde el más humilde ciudadano o militante, hasta el más encumbrado intelectual, o dirigente político o social; y honradez, para hacer la diferencia y ser ejemplo ante todo el pueblo mexicano.

¿Cuál es su importancia y objetivo?

El éxito en la lucha por nuestro desarrollo económico, por la independencia nacional, contra las privatizaciones, por la salud, el empleo, la educación, por un mejor salario, por la democracia, por el respeto a las conquistas obreras, por los campesinos y pescadores, por la libertad de expresión, etcétera, depende de que logremos la unidad de los mexicanos y sus organizaciones en un solo Frente Democrático y Patriótico, que enarbole un programa encaminado a dar respuesta a los más sentidos anhelos del pueblo.
Esta debe ser la mayor preocupación de todo mexicano que se precie de progresista y a esta labor deben dirigirse todos nuestros pensamientos, preocupaciones y esfuerzos, y sin protagonismos ni ambiciones personales y desmedidas de ningún tipo, tender una mano fraternal y sincera a todos los mexicanos y sus organizaciones, para lograr, juntos, la unidad de las fuerzas democráticas y progresistas en un solo frente, poniendo por encima de todo el interés de la patria y del pueblo mexicano.
Correo electrónico: a_babor@hotmail.com

1 comentario:

Unknown dijo...

Completamente de acuerdo. Gracias por compartir